Ya que la pre-temporada es la base en que se fundan los planes para toda la temporada de competencia para cualquier atleta, es que ponemos especial atención en esta fase a la hora que trabajamos con nuestros ciclistas, porque hemos detectado que algunos de ellos a pesar de ser practicantes de años, desconocían fundamentos básicos ó presentaban una serie de “vicios” posturales ó de mala ejecución cuando practicaban el ciclismo. Incluso hubo quienes trajeron una bicicleta que no era de su talla por años, por una creencia errónea y mala asesoría. Posiblemente es la plataforma que más resistencia presenta cuando se tienen que hacer adecuaciones. Durante la temporada la mayoría de los ciclistas dejan de lado el trabajo de gimnasio para dedicarse casi exclusivamente a la bicicleta y esto muchas veces resulta contraproducente, ya que si bien la fuerza es la cualidad que más rápido se adquiere, también es la que más rápido se pierde. Por esto es que se diseña un plan de trabajo de fuerza específico para cada ciclista que no afecte la forma, el ritmo de carrera ó la cadencia.
Hay varias formas establecidas a la hora de efectuar el parón. De todos los periodos del entrenamiento, es el más fácil ¿verdad? Pues no es así, también hay que saber perder la forma, en función de tus intereses.
El periodo de transición es igual de importante que cualquiera de los anteriores y por lo tanto es de obligado cumplimiento. Del mismo modo que a la hora de hacer unas series de calidad, necesitas aplicar una recuperación, para poder hacer otra serie en plenas facultades, dentro de la periodicidad anual del entrenamiento, es necesario aplicar otro descanso que te garantice posteriores ciclos de entrenamiento.
Esta transición es necesaria para descansar de la fatiga psíquica y física de periodos anteriores. Aunque creas que te encuentras bien y no pasa nada, el organismo debe cargar las pilas.
